TITULADOS
La noche del día 13 de enero pasó lenta y calladamente por sobre la casa, tan solo el viento por entre la abertura de mi ventana susurraba a mis oídos lo que la mañana siguiente tenía preparado para nosotros.
Como fue de costumbre el reloj sonó a las 7 de la mañana, fue poco lo que se pudo dormir, se piensa demasiado en momentos en que es bueno olvidar. Trataba de dormir un poco más cuando dieron las 08:45 y mi amigo y compañero llego a despertarme, lo que me recuerda de que tengo que quitarle las llaves de mi casa jajajaja
Estábamos comenzando el día en que cerraríamos cinco años y medio de una dura propuesta… la de ser mejores, la de seguir sintiéndonos orgullosos de nosotros mismos por lo que somos y lo que seriamos a contar de hoy.
Me levante de mala gana y comencé el ritual de ponerme por primera vez luego de muchos años un traje y corbata… la camisa algo chica entró a tirones el traje impecablemente negro y mi corbata amarilla regalona que a mucha gente no le gustaba. En el espejo un won impecablemente afeitado, con ojos aun dormilones, que no se dejaba de repetir… hoy es nuestro día.
Mi compañero preguntándome si tenia cigarros, para así calmar los nervios a las 9:30 de la mañana, sus nervios se reflejaban en su apretón de estomago que de seguro no le dejaba entrar ni un alfiler jaja. Compartimos un breve café y nos fuimos, teníamos una tarea que terminar un una promesa que cumplir.
Durante meses nos pusimos una propuesta bastante ambiciosa, comenzar la tesis teniendo aun ramos que cumplir, fue una labor bastante difícil, pero que se cumplió a cabalidad.
La historia continua en el viaje a la universidad, dándonos animo para lo que vendría luego… por mi mente recordaba aquellas exposiciones frente a señor Ortun, y pensaba que si fuimos capaces de sobrellevar a un tipo como él y salir airosos y con buenas notas, NADIE MÁS podría hacernos titubear, esa era mi confianza esta mañana.
La universidad con un aspecto sepulcral, nos dio la bienvenida y como era de costumbre no faltaron los problemas, la sala predispuesta para el examen de grado ya había sido cambiada, nos dimos 300 vueltas más por la universidad hasta que llego el coordinador de la carrera, quien también sería parte de los tres enjuiciadores que tendríamos.
Finalmente llegamos a la sala de la verdad… en conjunto con nuestro gran profesor guía, Magíster en comunicación estratégica de la Universidad de Compluto en España (je) y no se que cosas más. Pero los problemas siguieron el profesor corrector el malo de la película, venía atrasado, lo que sirve para aumentar los nervios típicos y previos a una exposición tan solemne con esta.
Con mi compañero estábamos impecablemente vestidos, solo nos faltó cortarnos las uñas de las patas y yo sacarme mis pulseritas, pero ya son parte de mi buena suerte así que tenían que ser testigo del magno evento que estábamos a punto de brindar con el Ricardo. Amigos entrañables desde el año 1988 con más de alguna pelea por ahí, nada de woman eso si han sido las causas.
Y bueno… llego al fin el profesor corrector, el dark vaider del asunto.
Entramos a la sala, muy bien arreglada para la ocasión, manteles por todos lados agua café galletitas, una gran mesa con las tres sillas de los enjuiciadores a 2 metros del telón de proyecciones, una para de palabras previas por parte del coordinador de nuestra carrera y los nervios se esfumaron.
!!!SEÑORES PUEDEN COMENZAR¡¡¡
Una mirada al fondo de la sala para sonreírle simbólicamente a mi madre que ya no esta conmigo, solo para que supiera que todo estaría bien, mi compañero y amigo dirigió su mirada a mi como diciendo YA COMPADRE AQUÍ SE PONE EN JUEGO TODOS ESTOS AÑOS.
Bien pensé, y como también decía Ricardo… a lo que nos convoca…
ESTIMADOS PROFESORES, COORDINADOR, mi nombre es…… el de mi compañero………. Y estamos reunidos aquí esta mañana para tratar el tema del aporte de las universidades privadas a la Ciencia y la tecnología en Chile…
Pero para esto es necesario darle una pequeña mirada a la historia… Tal vez ellos nunca supieron que la historia es una de las mejores cosas que yo conozco de este país.
Me tocó la dura tarea de comenzar a hablar frente a sus serios ojos, exprofesor corrector tomaba a punte de cada cosa que yo decía, pero fuimos sólidos desde principio a fin, creo que tomamos a los 3 inquisidores de esta mañana amarramos sus suspicacias y los metimos dentro de un saco del que no pudieron soltarse hasta que terminamos… realizamos una puesta en escena rotunda, recorrimos la historia desde el año 1622 hasta nuestros días, mostramos clarificamos y enseñamos a nuestros personeros de la universidad como se realiza la ciencia en Chile, dimos cátedra de un tema que no es bien conocidos por el común de la gente, fuimos alumnos de periodismo deportivo hablando como grandes científicos de este país, explicando cuadros estadísticos, gráficos por sensuales… y todo sin un papel en la mano, sin una hoja para recordar algo que se nos pueda haber olvidado… viernes, sábado y domingo. Una vez tras otra ensayando nuestra presentación, creo que fue la base del rotundo éxito de hoy día.
Fuimos avasalladores, seguros de lo que estábamos exponiendo, sin titubeos, sin nerviosismo con una prestancia digna de las experimentado orador… ellos no son Juan Francisco Ortún, entonces son abordables, esa consigna fue buenísima a la hora de mirarlos a los ojos mientras hablábamos.
Termino de exponer mi amigo Ricardo y la cara de los 3 profesores era sorprendente, la verdad es que no tenían nada que decir, si no más bien preguntar alguna guevada para tratar de justificar su estadía allí… una ronda de preguntas que logramos sortear sin mayor problema y FIN
Señores su nota es un 6.9
GUAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
No se que más escribir, no se que más decir… aun no creo que todos estos años por fin se terminaron… extraño a mucha gente que se perdió en el camino y que pudo estar hoy con nosotros… pero bueno mañana comienza un nuevo día, una nueva historia, unas nuevas ganas de echar el tiempo atrás y ver si existe aun esa lejana oportunidad de volver a comenzar….
queda pendiente la foto :D
Licenciado Viajero Chile… con la sonrisa de oreja a oreja, como esas tardes en el sur
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